Dios, Padre misericordioso, hoy me dirijo a ti con humildad y con un corazón arrepentido por mis errores y pecados. A veces, siento que he perdido mi camino y que me he alejado de ti, y eso me hace sentir triste y desesperado. Pero sé que tú eres un Dios de perdón y que siempre estás dispuesto a ayudarme a superar mis errores y a volver a ti.
Padre, te pido que me ayudes a reconocer mis errores y a asumir la responsabilidad por mis acciones. A veces, me cuesta reconocer que he cometido errores, o trato de justificarlos o de culpar a otros. Pero sé que esto solo me aleja más de ti y de tu amor. Ayúdame a tener el coraje de reconocer mis errores y a pedir perdón a quienes he lastimado.
Dios, también te pido que me ayudes a perdonarme a mí mismo. A veces, me siento atrapado en sentimientos de culpa y vergüenza por mis errores, y esto me impide avanzar en mi vida y en mi relación contigo. Ayúdame a entender que soy humano y que todos cometemos errores, pero que tu amor y tu perdón son infinitos. Ayúdame a liberarme de la carga de mis errores y a confiar en tu gracia.
Señor, te pido que me des la fuerza y la sabiduría para cambiar mi comportamiento y evitar cometer los mismos errores en el futuro. A veces, siento que estoy atrapado en patrones de comportamiento negativos que me llevan a cometer errores una y otra vez. Pero sé que tú eres un Dios de cambio y que siempre estás dispuesto a ayudarme a transformar mi vida. Ayúdame a ser consciente de mis debilidades y a trabajar en ellas con tu ayuda.
Dios, también te pido que me des la gracia de crecer en la virtud. Ayúdame a cultivar la humildad, la paciencia, la compasión y la generosidad. Ayúdame a ser un mejor amigo, un mejor cónyuge, un mejor padre o madre, un mejor hijo o hija, un mejor empleado o empleador. Ayúdame a ser un mejor ser humano, lleno de tu amor y de tu gracia.
Gracias, Padre, por escuchar mi oración y por estar siempre dispuesto a ayudarme a superar mis errores. Confío en tu misericordia y en tu amor. Ayúdame a reconocer mis errores, a perdonar a los demás y a perdonarme a mí mismo. Ayúdame a crecer en la virtud y a ser un mejor ser humano, lleno de tu amor y de tu gracia. Que tu voluntad se cumpla en mi vida, y que siempre te glorifique en todo lo que hago. Amén.